A la mañana siguiente me levanté con una sonrisa. ¿No habéis mirado alguna vez a vuestro alrededor, y lo veis todo bonito?, ¿Todo por muy absurdo que parezca, es precioso ese día?
Me di la vuelta en mi cama y me quedé mirando el techo de mi cuarto. ¿Realmente lo de anoche fue un sueño? Me miré en el espejo de mi habitación antes de salir. Tenía las mejillas sonrosadas, y un brillo extraño en los ojos. Casi ni me reconocía. Parecía otra persona. Estaba feliz. ¿Cómo puede una persona hacerte tan feliz ?, ¿me estaba ilusionando demasiado?
Me vestí con las botas de montaña, una sudadera y un pantalón estrecho, me puse dos pares de calcetines más. Odiaba tener frío en los pies, y al parecer allí iba a hacer mucho. Salí disparatada al cuarto de baño, me asee, y peine el cabello cobrizo, estaba liso, pero aun así me pase la plancha. En cuanto abrí la puerta me encontré a Dexter en la entrada de la puerta.
-¿Qué estabas haciendo? que coñazo, siempre igual, tú la primera, me voy a mear encima_ya empezaba siendo idota desde por la mañana temprano. Genial.
-¿Por qué cuando algo es una mierda es ''un coñazo'' y cuando algo es divertido es ''la polla''?._dije muy seria. Siempre me pareció más absurdo de lo normal.
-Mira déjame._ y a continuación se escucho un ruido parecido al de las cataratas del Nihagara. Que tendría en la vejiga...
Eric se reía a carcajadas. Ni siquiera me había percatado de que estaba ahí.
-¿De que te ríes? lo digo muy enserio._
-De ti. Me rió de ti._dijo frunciendo el ceño. Sus ojos azules no se apartaban de mi, y me estaba empezando a poner nerviosa.
Enarqué una ceja.
-¿Disculpa?._dije haciéndome la interesante.
-¿Qué?
- ¿Te has visto los pelos que llevas?_en realidad estaba guapísimo, como siempre. Aunque tuviera el pelo despeinado, o algo desaliñado el siempre estaba perfectamente perfecto.
No paraba de mirarme a los ojos. ¿No os parece increíble todo lo que puedes llegar a decir, sin articular palabra alguna?
Lo bonito que es mirar a una persona y saber que es importante en tu vida, ver como se te iluminan los ojos con tan sólo verle mientras tienes una sonrisa dibujada en la cara y eres consciente de que si te falla o te falta se te derrumbaría el alma.
Me acerque un paso hacía delante, me puse de puntillas. Eric me sacaba dos cabezas como minímo, y eso que yo soy bastante alta. Su flequillo rubio iba en distintas direcciones, y yo se lo acomodé de manera que sólo fuera hacia una.
¿Qué se supone que hago?, ¿con qué derecho le toco su cabello? Para, me dije. Para si no quieres hacerte daño después. Mi mano se congelo y la baje enseguida. Cuando recordara esto, y supiera que el y yo no somos nada, sería más difícil. Os dije que Eric me podía hacer muy feliz. Pues si, es la verdad, pero también me puede hacer mucho daño. Demasiado. Pensé en el viaje a Alaska y en su club personal de admiradoras. De repente me puse nerviosa y miré hacia el suelo.
-Esto... yo mejor me voy._dije, y me juego el pescuezo a que mis mejillas se volvieron de un rojo intenso.
-Espera._dijo cogiéndome de la mano, y eso me recordó a la noche pasada.
-¿Por qué te ruborizas?_dijo
Maldita sea... lo sabía.
-Por nada... adiós._dije muy tosca.
Empecé a andar escaleras a bajo. Soy una estúpida.
-Evelyn, tengo que preguntarte algo.
-¿El qué?._ ¿qué soy tonta...? eso ya lo sé.
-¿Quieres se mi compañera de avión?_dijo sonriente.
-¿Quién?_¿enserio se estaba dirigiendo a mi?
-Pues tú, lógicamente..._hizo una pausa._-Pero,oye si no quieres... no pasa nada._
-Eh..no, no,... si, si quiero._dije titubeando. Parezco idiota.
Si quiero. Me sonó a boda.
-Entonces perfecto. Lo pasaremos bien. Por cierto...
Le corté.-¿Qué?_
-¿Tendrás tapones para los oídos...no? Es que ronco bastante._dijo muy serio.
La cara que puse le debió de hacer gracia, porque explotó en una carcajada en cuestión de segundos.
-Es broma, es broma..._dijo sin parar de reirse.
-Idiota..._idiota, estúpido, guapo, perfecto. Él sonriendo, él y su pelo, el y su forma de ser, él y sus ojos, capaces de describir lo imposible, él y su sonrisa. Él es idiota con motivos. ¿Cómo puedo mirarle y sonreír sin ningún motivo?
-Sí... suelen decirmelo a menudo._y giro la cabeza hacia un lado y eso me mató.
-Bueno, pues tu eres tonto e idota.
-Perfecto._dijo sonriente, como siempre.
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